Gracias
por visitar y leer mi página, ya que este blog forma parte de
una práctica escolar de la materia de NTIC, de la Universidad de
Sonora. Trataré un tema muy importante para los Sonorenses y puede
ser de mucha ayuda por si alguien de nuestras familias son
consumidores.
Los
alimentos
transgénicos
son aquellos que han sido producidos a partir de un organismo
modificado mediante ingeniería genética y al que se le han
incorporado genes de otro organismo para producir las características
deseadas. Por tanto, es un ser que no existiría en la Naturaleza si
no fuera por la intervención del hombre. En la actualidad
tienen mayor presencia de alimentos procedentes de plantas
transgénicas como el maíz o la soja.
Ejemplos de alimentos transgénicos
-Así, por ejemplo, el maíz transgénico que se cultiva en España desde 1998 lleva incorporados genes de bacterias que le permiten producir una sustancia insecticida con la que la propia planta transgénica combate posibles plagas .
-Pero
también hay patatas más dulces, tomates que tardan más en
estropearse, café con mayor aroma y menos cafeína, trigo sin
gluten, uvas sin pepitas, arroz con vitamina A o leches enriquecidas
con fármacos.
¿En qué nos benefician los alimentos transgénicos y en qué no?
Nos beneficia en:
-Podremos consumir alimentos con más vitaminas, minerales y proteínas, y menores contenidos de grasas.
-Cultivos más resistentes a los
ataques de virus, hongos e insectos.
-Mayor tiempo de conservación de frutas y verduras. Aumento de la producción.
-Disminución de los costes de la agricultura.
-Mayor tiempo de conservación de frutas y verduras. Aumento de la producción.
-Disminución de los costes de la agricultura.
No
nos beneficia en:
-Utilización
de muchos fertilizantes y plaguicidas.
-Erosionan el
suelo.-Amenazan nuestra salud.
-Pérdida de la diversidad genética.
-Consumo de combustibles fósiles y liberación de gases invernadero.
-Deforestación.
-Agotamiento de acuíferos.
Aspectos críticos para la salud
Gran
parte de la controversia sobre los AT gira en torno de hasta qué
punto son un riesgo y si vale la pena correrlo. Entre las amenazas y
preocupaciones en esta área están las siguientes: alergias,
resistencia a antibióticos, preocupaciones por el uso de virus en
las modificaciones genéticas, alteraciones en el contenido nutritivo
de los alimentos, e incluso la presencia de efectos tóxicos que
pueden llegar a ser severos e inclusive letales. A modo de
ilustración, el caso del consumo del suplemento alimentario
L-triptófano, obtenido a partir de una bacteria transgénica
(Bacillus amyloliquefaciens), el cual ocasionó una condición
denominada “mialgia eosinofílica”, que provocó la muerte de al
menos 37 personas, además de daños permanentes a 1500 individuos en
los EE.UU. entre 1989 y 1991 (Fagan, 1997